EL SENDERO DE LOS APALACHES: Georgia…North Carolina…Tennessee…Virginia…West Virginia…Maryland…Pennsylvania…New Jersey…New York…Connecticut…Massachusetts…Vermont…New Hampshire…Maine

domingo, 30 de abril de 2017

AT000-Viaje a Springer Mountain

Hola amigos,

Después de algunos apuros en el aeropuerto de Frankfurt, debido al retraso en el vuelo desde Bilbao, llegué el viernes a Atlanta, en Georgia, donde tuve algún inconveniente en los controles policiales. Lo del Appalachian Trail les sonaba muy raro, incluso llegaron a pensar que llevaba embutidos en mi mochila. Ya me hubiera gustado a mí.

Mi estancia en esa ciudad ha sido breve. Apenas descansar del viaje en el hotel Howard Johnson Atlanta Airport, ubicado Phoenix Boulevard, muy cerca del aeropuerto y adaptar mi hoja de ruta a la situación.

El personal de Recepción del hotel, cuando les  he comentado lo que voy a hacer en los próximos meses, sencillamente no daban crédito y alucinaban conmigo. Nos les entraba en la cabeza que alguien pudiera intentar siquiera hacer algo así. Me preguntaban si había venido en coche y que dónde estaba mi "car". Atlanta es una ciudad muy extensa y usan el vehículo para todo. Es muy complicado tomar el pulso a una ciudad cómo esta en apenas unas horas y, por ello, las dificultades a salvar son muchas. Estoy totalmente sorprendido del desconocimiento que tiene la gente sobre los Apalaches. No saben ni lo más básico.


Sábado, 29 Abril

Durante la mañana tengo tiempo para recorrer a pie la ciudad, situarme, y ver poco a poco su modo de vida. Hay mucho movimiento, especialmente en los supermercados, gasolineras, etc., quizá por realizar en este día las compras semanales. No puedo saber el porcentaje de población de color, pero os aseguro que es elevadísima.

Durante varias horas paseo por la zona Sur de Atlanta, recorriendo alguno de los barrios residenciales, con casas bien cuidadas de madera o combinadas con ladrillo caravista, en las que no es raro ver hasta cinco coches aparcados en el porche. Me atrevería a asegurar que uno para cada miembro de la familia… Hay un olor muy especial y agradable en el ambiente, que no consigo averiguar. También me he acercado a ver una iglesia Baptista, en concreto Christian Fellowship Baptist Church, la cual, después de tres intentos he podido visitar. Me hubiera gustado asistir a un oficio religioso, pero no ha podido ser. Durante mi paseo no he visto a nadie caminando. Definitivamente, el coche es aquí un miembro importante de la familia.

Desde Atlanta hay que desplazarse hasta Amicalola Falls State Park, a unas 100 millas al norte, donde se encuentra Springer Mountain, el lugar de salida del Appalachian Trail. Para ello, he regresado al aeropuerto para tomar un autobús hasta Gainesville, con la compañía Greyhound.

Para ir hasta esa localidad la opción más económica es tomar el tren MARTA, desde el aeropuerto hasta la estación Garnett y, saliendo de la misma, a unos pasos, de encuentra el edificio de autobuses (33.748581, -84.396423) de la compañía  Greyhound. El tickect tiene un coste de 28,15 USD$, y la salida del autobús es a las 16:40h

Teóricamente el bus que he cogido me lleva desde Atlanta a Gainesville, donde tendría que haber pasado la noche, pero un error imperdonable del "driver", o conductor del bus, ha hecho que venga a dar las buenas noches a los ciudadanos de Carolina del Sur, teniendo que pernoctar a 167 km al noreste de mi destino previsto, concretamente en Greenville.


Domingo, 30 Abril

A las 09:40h tomo o
tro autobús de la misma compañía que me lleva de regreso hasta Gainesville, algo que he logrado hacer sin coste alguno.

Debido a este incidente he tenido la oportunidad de viajar en bus durante muchas horas y me han llamado la atención lógicamente numerosas cosas, pero dos especialmente. Una, las carreteras son buenas y no tienen ni un 5% de señales de tráfico que tienen las de España; y dos, no he visto un solo radar en los cientos de km que he realizado. Sacad conclusiones. Al margen de estos dos detalles, os aseguro que Carolina del Sur es una preciosidad de lugar. Sus paisajes y sus casas bien cuidadas son sencillamente esplendidos.

Una vez en Gainesville, junto con una pareja que también tienen la intención de hacer todo el Sendero de una sola vez, hemos contratado un taxi en la misma terminal de autobús. Lloyd, que así se llamaba el taxista, nos lleva a comprar comida para permanecer varios días en la montaña. El supermercado Walmart (34.537288, -83.975704) al que hemos acudido está muy bien y tiene prácticamente de todo, por lo que considero una buena opción, sino la mejor, antes de subir a Springer Mountain.

Comentar que el quemador "camping gaz" que traía para cocinar es incompatible con las botellas de gas que hay aquí, por lo que he tenido que comprar un quemador nuevo, con su carga correspondiente. En mi opinión el coste del taxi me ha parecido muy elevado, aunque no mencionaré el importe.

Llevo muchísimo peso en la mochila. He de aligerarla lo antes posible y eso es porque aún no controlo la situación. Espero que el día a día y la experiencia adquirida a lo largo de la travesía, me irán marcando el patrón a seguir más conveniente para mi, en lo referente a la comida y también en otros aspectos relacionados con la logística, que en el Appalachian Trail es fundamental.

He instalado la tienda en un campsite, pero después de una hora he decidido quitarla, porque contravenía algunas normas básicas de seguridad para con los osos, regresando al Shelter de Springer (34.629300, -84.193657), que había dejado atrás.


En numerosas ocasiones me pregunto porqué hago este tipo de cosas, con lo fácil que sería estar en Canarias o en Andalucía en una playa, descansando, sin hacer absolutamente nada. Supongo que lo hago para sentirme vivo, para comprobar una y otra vez que la vida es luchar contra la adversidad, superarse a si mismo, conocer otras culturas y maneras de hacer las cosas, sentir…, en definitiva aprender y compartir los sueños con los demás. Pienso que, de alguna forma, soy un acumulador de recuerdos, de esos recuerdos vitales e intensos que dejan una huella profunda en el alma y que Antonio Machado definía como estelas en la mar, algo absolutamente esencial para vivir, a mi entender.

Ya con la cena hecha y dentro de mi tienda, me despido con la canción "Abriendo caminos" de Diego Torres y Juan Luis Guerra". Hace viento y llueve con fuerza...

Un abrazo


2 comentarios:

  1. Egurre osaba!! Disfruta solo como tú sabes!! Un abrazo gordo

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  2. Basajaun (Jon Galdos)5 de mayo de 2017, 4:22

    Eskerrik asko Andoitz!!
    Aquí voy poco a poco, con mal tiempo la verdad. Un abrazote

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